Bucear con Squba

Los que ya tengáis unos añitos os acordaréis de Herbie, un simpático Volkswagen Escarabajo, que tenía vida propia y era capaz de bucear sin que sus ocupantes se mojaran ni un pelito. Herbie fue el protagonista de varias películas de la factoría de Walt Disney. Enamoró a medio mundo y a otro dejó con la mosca detrás de la oreja sobre la posibilidad de que un coche real buceara.


Herbie, el original. Ya no es una conjetura sino una realidad. Se llama SQuba (de Rinspeed), es capaz de sumergirse hasta 10 metros y es el último vehículo que se incorpora a la nueva moda de gadgets submarinos (aunque esto de gadget tiene poco porque es un vehículo biplaza en toda regla).


Este turismo posee tres motores, usa la energía eléctrica para desplazarse y los lubricantes son biodegradables.


Dice el fabricante que “por razones de seguridad hemos fabricado el vehículo como un coche abierto para que los ocupantes puedan salir rápido en caso de emergencia. Con un habitáculo cerrado, abrir la puerta (debajo del agua) sería imposible”.


El tema de la respiración bajo el agua lo han solucionado incorporando varios tanques y válvulas de oxígeno. Y para los que duden, sí… el interior es resistente al agua. SQuba no es un vehículo para todos los públicos ya que uno de sus detalles decorativos está realizado con diamantes incrustados.
 
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